TÚ CALLE, LA MÍA… Y ABRIL
POR: TEODORO COUTTOLENC
(In Memoriam)
Si yo cruce por tu calle
tú sedujiste la mía
con tu presencia fantástica,
con tu voz… con tu osadía.
¡Ay, abril! Abril, abril
¿por qué terminas
cuando las rosas
quieren florecer?
¿Por qué te alejas
cuando empiezan
los lazos a penas
a reverdecer?