TEGUCIGALPA
POR: JOSÉ MUÑOZ COTA
(In Memoriam)
Tegucigalpa, no tienes resplandor.
Duermes, como duermen las plantas,
las hierbas y el silencio sin flor.
Un coro de luciérnagas te vela.
Casi un presentimiento
de lucecitas,
velitas de colores que encienden las abuelas
en la noche cordial del Nacimiento.