SANDALIAS DEL ALMA
POR: JOSÉ MUÑOZ COTA
(In Memoriam)
Mis dudas, piedrecillas picudas
rompieron las sandalias del alma.
Si buscar la verdad fue mi destino
y Tú eres la verdad redonda, entera,
¡qué superfluo el oficio de la vida!
cómo dejamos el corazón como propina…
cómo el amor sin huéspedes se queda.
No hay clavo ardiente dónde asirse.
Nuestra herencia de estrellas esfumada,
hipotecamos la esperanza flaca,
y dentro del embudo de la nada
la nostalgia de Dios nos llena el alma.