Huatusco celebra a su Santo Patrono San Antonio de Padua.
*** Se cumplen 53 años de la Consagración del Templo.
Huatusco, Ver. – Como cada año la feligresía de este municipio celebra al Santo Patrono San Antonio de Padua y para eso desde el pasado viernes 10 de junio se iniciaron las actividades religiosas, en donde participan las comunidades pertenecientes a esta localidad, así como municipios aledaños.
Esta fecha es de gran orgullo para el pueblo huatusqueño, ya que aparte de celebrar el día de San Antonio de Padua, se recuerda a un gran personaje que fue propulsor de la fe y progreso del pueblo como fue el sacerdote Enrique Simón Trejo y Domínguez, cuando a base de muchos sacrificios y con el apoyo de todo el municipio, al cual le inculco el espíritu de la hermandad; un 13 de Junio de 1940 se puso la primera piedra de lo que ahora es el Templo de San Antonio de Padua, una de las más grandes del estado, siendo en aquel entonces obispo Manuel Pio López quien la consagro como Parroquia, este año se cumplen 53 años.
La efigie de San Antonio que se encuentra en su interior mide nueve metros de alto y es obra de un escultor de origen Alemán de nombre Heiber Hoffmann Ysemburg, los vitrales que rodean al templo fueron traídos de Europa y algunas imágenes fueron diseñadas de acuerdo al estilo vanguardista de la construcción.
Lo tradicional y que hasta estas fechas se puede ver, es que las jovencitas todavía siguen las creencias o consejos de la abuelita, acuden a la sagrada imagen para colocarle 13 moneditas para que puedan conseguir un buen novio o marido, lo curioso es que esas monedas tienen que ser regaladas, para que el Santo pueda hacer el milagro.
También este Santo es venerado para hallar cosas perdidas, en aquel entonces los feligreses acudían a ver a San Antonio y le amarraban la cintura, para que les ayudara a encontrar lo extraviado.
San Antonio de Padua, nació en 1195 en Portugal. Primero fue canónigo regular y después entró en la Orden recién fundada de los Hermanos Menores, para propagar la fe entre los pueblos de África, pero se dedicó a predicar por Italia y Francia, donde atrajo a muchos a la verdadera fe. Escribió sermones notables por su doctrina y estilo, y por mandato de San Francisco enseñó teología a los hermanos, hasta que en Padua descansó en el Señor. († 1231) Fecha de canonización: 1 de junio de 1232 durante el pontificado de Gregorio IX.
