EN EL PUERTO
POR: JOSÉ MUÑOZ COTA
(In Memoriam)
En el puerto,
Hombres y mujeres muestran su pasaporte
al funcionario adusto.
Lo ve, lo palpa, toma radiografías
y el pasajero,
ya el corazón legalizado,
se arroja de cabeza al mar.
Yo no traigo pasaporte,
ni la recomendación de una tragedia grande,
traigo una pequeña lágrima,
una rústica nave
con remos astillados.