CUANDO LA MAR…
POR: TEODORO COUTTOLENC
Cuando la mar se vaya,
me dejará la playa
llena de caracolas
y de estrellas marinas…
Cuando la mar se vaya,
recogerá sus olas
coronadas de espuma
y ahítas de mis días…
La distancia más larga
joh, eterna tortura!
Es tenerte allá enfrente
sin que mi voz te toque;
la soledad más fría
es saberte a unos pasos
sin poder aspirarte
ni contender contigo.
Solo, en el estero de tus humedales plenos,
busco redimir auroras
donde besar tu cuerpo,
tus glorias más recónditas.
Y anhelo libertad
para ensalzar tus manos
con plenitud de fuego,
con orfandad de viento.
Ante el mar, que señorea
distancia, soledad,
caracolas y estrellas,
noche tras noche reclamo
mojar mi sed en la orilla
de tu humedad serena
para escribir a hoguera
sobre playas y arenas
una sola sentencia.
Escribiré: «Te amo»>.